Todos los comercios son diferentes en términos del valor que les proporciona a los consumidores finales, y por lo tanto, el canal de distribución tiene algunas variaciones. Una compañía de pequeñas dimensiones toma en cuenta a los distribuidores y mayoristas, pero otros fuertes cuentan con su propio equipo de comercio, y cuando estos tipos de empresas compiten entre sí, es probable que existan diferencias.
El territorio y la forma de operar suelen ser unos factores diferenciales, sin embargo, existen tipos de mayoristas que son utilizados por casi cualquier tipo de empresa o comercio, los cuales son de vital importancia conocer si se busca mejorar las condiciones del negocio actual o construir un distribuidor propio. En este caso, hablaremos acerca del mayorista del servicio completo.
Los mayoristas de servicio completo, también llamados mayorías minoristas son los que se encuentran con alta frecuencia en productos que tienen consumo duradero, o relacionados con la ingeniería e industrias similares. Brindan un servicio completo hasta llegar al minorista final.
Su principal espacio de operación se encuentra presente en el mercado minorista, vendiendo productos a un revendedor, todo esto siendo responsabilidad del mayorista a servicio completo. En la vida real, muchos de estos tipos de comercio comienzan un segundo modelo de negocio que se relaciona con los servicios, brindando esos a los productos que venden al mayor.
De esta manera, la estrategia comercial aumenta considerablemente teniendo pedidos de ventas y de servicio. Esto les da una característica de especialización funcional, ya que la reventa de los productos no es la única acción que realizan por lo general.
Entre otras tareas, pueden estar encargados de la gestión de inventario, el transporte, el almacenamiento, la conservación de mercancías, la financiación, el asesoramiento y toda clase de tareas que pueda resultar beneficiosa para algunos comercios minoristas.